martes, 19 de abril de 2016

COLOMBIA  ECONOMÍA DE POCOS
Bien se sabe la economía Colombia se basa generalmente en los beneficios personales, esto  es por el simple hecho de que cada persona busca su bienestar propio  y de su familia, no importándole los demás. Ante los sucesos que se viven en la economía mundial, y particularmente en la Colombiana, todos nos agarramos la cabeza tratando de analizar cómo atender las múltiples necesidades con los escasos recursos disponibles y con la amenaza cierta de la difícil obtención de créditos en un mundo en recesión. Pensar en reformas tributarias para ampliar los recaudos con enfermo grave, es bastante complicado. Cuando lo indispensable es dinamizar la demanda para atender la recuperación de unas industrias, que ven con preocupación la situación externa, apretarlas con más impuestos sería casi suicida.
Ampliar el endeudamiento interno, con cifras como las que se le han mostrado a la opinión pública de la tasa de crecimiento del endeudamiento en pesos, tampoco parece ser la vía correcta para resolver los problemas de inversión pública. Además de todos estos problemas, la inversión privada en las áreas que pueden generar empleos (bien remunerados y de manera rápida), tampoco aparece, debido al círculo perverso de invierto porque la economía no crece y, por tanto, no aumenta la demanda y ello no ocurre porque no hay inversiones nuevas en sectores estratégicos. Si a este cuadro, le sumamos las dificultades en el orden público y la persistente crisis del proceso de paz, las cosas se tornan más oscuras.
Cómo enfrentarnos entonces al círculo en que se ha convertido el problema de más gasto, indispensable y urgente para reactivar la demanda, con la necesidad de hacer los ajustes fiscales indispensables, para que la economía sea viable en los años subsiguientes. Además, cómo lograr que las propuestas de reforma pensional y de transferencias, cuadren con la del IVA social y con las adiciones presupuestales para atender al Seguro Social, a los Cafeteros y al pago de los trabajadores campesinos y de familias dependientes de un salario mínimo.


4 comentarios:

  1. creo que mientras las tazas de pobreza y miseria sean tan altas en nuestro país sera muy difícil pensar en unos ciudadamos que piensen en la idea de un desarrollo colectivo porque si miramos en la actualidad las personas que están en situación de pobreza extrema y miseria que son la gran mayoría tiene pensamientos de sobre-vivencia y los pocos ricos en enriquecerse mas mientras esa situación siga sera muy difícil cambiar este problema

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  3. La educación es el pilar fundamental para reducir las tazas de pobreza en nuestro país, ya que teniendo gente preparada para cualquier área se lograran mejores ideas de progreso para las regiones del país.

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  4. La tasa de pobreza cada ves parece ser mayor en nuestro país, la alternativa que sugeriría sería administración, que nuestros gobernantes aprendan a administrar y distribuir bien el dinero destinado para las necesidades de la población colombiana. Y con esto se conlleve a la educación como menciona la compañera anteriormente, pues esta es fundamental para el progreso de todas las familias.
    En cuanto a lo que mencionas de que la comunidad debería pensar en el bien colectivo, de todos, es muy difícil cambiar esta percepción porque hoy en día uno se ha acostumbrado a pensar primero yo, luego yo y por último yo, nunca piensan en los demás.

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